A continuación se mencionan algunos síntomas específicos que pueden darte información y mayor claridad para reconocer si todo el malestar que presentas últimamente pudiera ser una depresión nerviosa, muy a menudo confundida con algún padecimiento físico y que tiende a agudizarse cada vez más cuando no se acude al tratamiento adecuado.
SÍNTOMAS EMOCIONALES
•Estado constante de abatimiento, tristeza y sentimiento de vacío
•Apatía y mal humor
•Sentimientos de inutilidad, impotencia y culpa
•Pesimismo, desesperanza
•Irritabilidad o enojo
•Poca o nula capacidad de disfrutar
•Tendencia al llanto
SÍNTOMAS CONDUCTUALES
•Fatiga y cansancio continuo
•Lentitud en movimientos y lenguaje
•Postura y tono de voz decaídos
•Críticos con otros pero principalmente consigo mismo
•Exigencias hacia los otros de afecto, constancia y dedicación
•Pasividad, poca iniciativa y espontaneidad
•Seriedad, tristeza, introversión
•Apariencia desolada y abatida
SÍNTOMAS COGNITIVOS
•Lentitud para pensar
•Dificultades en concentración
•Autocensura y culpa por aspectos irrelevantes
•Baja autoestima
•Incapacidad para disfrutar y relajarse
•Carente sentido del humor
•Actitudes derrotistas y fatalistas
•Temor de ser abandonado, de no ser querido
•Esperanza de que ocurra lo peor
•Sentimientos de indefensión y desamparo
•Tendencia a preocuparse constantemente
Se puede disminuir la gravedad y los síntomas de la depresión, llegando incluso a quedar en el pasado, por medio de terapia farmacológica y psicoterapéutica, buscando que no llegue a amenazarte durante toda su vida, por lo que si te identificas con los síntomas antes mencionados es tiempo de buscar ayuda profesional con un psiquiatra o psicólogo competentes en esta área, para recuperar tu calidad de vida y disfrutar de nuevo el camino de vivir.